El sector considera necesario que la Unión Europea acelere acuerdos como Mercosur o India y se diversifiquen mercados
LLYC ha organizado en su sede el coloquio “Guerra comercial USA: crisis del comercio basado en reglas y el sector agroalimentario”, un evento privado que reunió a expertos y representantes institucionales para analizar el impacto del giro proteccionista del segundo mandato de Donald Trump en el comercio global, con especial énfasis en las exportaciones agroalimentarias europeas.
El encuentro, moderado por Fernando Moraleda, director de la Oficina Alimentaria de LLYC, contó con las intervenciones principales de Fernando Miranda, consejero de Agricultura, Pesca y Alimentación en la Representación Permanente de España ante los Organismos Internacionales en Ginebra, y Marisa Poncela, asesora senior de LLYC y ex secretaria de Estado de Comercio.
Miranda subrayó que la Organización Mundial del Comercio (OMC) atraviesa lo que describió como una “crisis de los 30 años”, caracterizada por bloqueos en su gobernanza, falta de transparencia y el colapso del mecanismo de resolución de disputas. “Si la OMC no existiera, habría que crearla”, comentó, destacando que, aunque imperfecta, sigue siendo esencial para el orden comercial internacional.
El consejero advirtió que las nuevas medidas arancelarias implementadas por Estados Unidos violan la cláusula de nación más favorecida y afectan gravemente sectores como el de la aceituna negra y el vino. Aunque el aceite de oliva podría contrarrestar el impacto debido a la cosecha récord de este año, el vino europeo podría perder competitividad frente a países como Chile y Australia, a los que se les ha aplicado una tarifa del 10%.
Por su parte, Marisa Poncela alertó sobre el riesgo de que el mundo se adentre en un nuevo orden comercial más proteccionista, similar al del siglo XIX, en lugar de mantener el multilateralismo de las últimas décadas. Señaló que tanto Estados Unidos como otras potencias, como Reino Unido, se están distanciando del sistema de resolución de disputas de la OMC, lo que indica un movimiento hacia una “renacionalización del comercio” en el que el poder y la reciprocidad priman sobre las reglas establecidas.
El evento también abordó el Proyecto 2025, la estrategia ideológica impulsada por la Heritage Foundation y puesta en marcha por Trump desde el inicio de su mandato. Aunque aún no se han formalizado decretos específicos sobre aranceles, Trump ha anunciado tarifas del 25% a las importaciones de Canadá y México, reforzando su enfoque de presión unilateral para forzar negociaciones bilaterales con sus socios.
Ambos ponentes coincidieron en la necesidad urgente de que la Unión Europea acelere acuerdos como los de Mercosur o el pacto con India, diversifique sus mercados y se prepare para un entorno comercial más competitivo y fragmentado.
La próxima cumbre de la OMC, prevista para 2026 en Camerún, será clave para reestructurar el marco global y recuperar los principios fundamentales del comercio internacional basado en reglas.