Académico de honor, en su trayectoria profesional ha pasado por la radio y varias agencias de publicidad
Licenciado en Derecho y técnico en Publicidad, Fernando Romero Pérez (1936) inició su carrera publicitaria en la legendaria Hijos de Valeriano Pérez, agencia relacionada con su familia. En 1964 pasa fugazmente por Publinsa Kenyon & Eckhardt, donde coincide con Julián Bravo. Un año más tarde comienza una larga etapa en el medio como director comercial de la SER, donde se le considera promotor de una nueva forma, moderna, de entender y gestionar la publicidad en la radio. En palabras de Iñaki Gabilondo, “Fernando Romero fue para nosotros la bandera de la modernidad». Prueba de esa modernidad basada en rigor y datos de audiencia es que formara parte de la junta gestora del Estudio General de Medios (EGM). En 1972 deja La Ser y es nombrado director de Interalas en Madrid, compartiendo puesto con Francisco Calatayud en Valencia y Lluís Bassat en Barcelona. En 1975 deja la agencia y se incorpora a Arce & Potti. Tiene 39 años. Poco después, junto al gallego Máximo Sanz funda Sanz, Romero y Asociados. Su última etapa profesional transcurre como consejero delegado de Bassat Ogilvy & Mather y de Publicis Casadevall & Pedreño.
Tras dejar la publicidad, se dedica a la investigación y la realización de una tesis que mereció premio extraordinario en 2010 (Campañas de propaganda en Dictadura y Democracia, referendos y elecciones 1947 a 1978) actividades que han supuesto un puente con una profesión que sigue llevando en la sangre.
En relación a su fallecimiento, Luis Bassat nos ha remitido el siguiente obituario: “Fernando Romero ha fallecido dejando un recuerdo imborrable en la publicidad española. Entre las muchas campañas que realizó desde Bassat Ogilvy recuerdo especialmente la campaña mundial para obtener visitantes a la Expo de Sevilla’92, cuyo objetivo era 40 millones de personas y que finalmente fue visitada por alrededor de 44 millones.
Gracias por todo lo que has hecho en tu larga vida de publicitario. Luis Bassat”
Ilustración: Academia de la Publicidad