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Daniel, el mejor en su Campo

Ricardo Pérez, sobre la jubilación de Daniel Campo

Daniel esperó a dar la campanada en el día de la publicidad: me jubilo, nos dijo para sorpresa de todos.

A los que tenemos una edad -o dos o tres- y no nos hemos jubilado oficialmente una noticia así nos deja perplejos y desconcertados.

Se jubila ese siempre joven reportero, que acudía a todos los eventos dispuesto a tomar nota de lo que pasa y de lo que no, como si fuera un redactor recién llegado y no el director de la publicación.

Sencillamente, sin darle importancia, sin alharacas, tan frecuentes en un mundo donde los egos entran en juego y muchos deciden dirigir desde el despacho y que se muevan los “curritos”. Tanto en las revistas como en las agencias.

Cada revista tiene su política y su afán, pero hay que reconocerle a “El Publicista” que, 25 años después, sigue siendo tan cercana y empática como el primer día. Promueve las nuevas tecnologías y a los emprendedores con futuro, pero siempre hay un espacio para los clásicos.

A lo que vamos. Resulta que se retira de la actividad diaria uno de los directores de revista profesional que ha cuajado un proyecto que, cuando empezó, fue como una inyección de juventud y frescura en el mejor de los sentidos, en un sector tan asentado que necesitaba una aportación como la que supuso “El Publicista”.

“El Publicista” vino a ser la culminación de una labor como la que Daniel venía desempeñando en la revista “Campaña” como redactor primero y jefe de redacción después.

Es verdad que, repasando su trayectoria, nos damos cuenta de que pasa el tiempo, aunque a algunos, como Daniel, apenas se les note.

Por cierto, que no todos recibimos “El Publicista” sin objeciones. La mía fue por el dichoso nombrecito.

Resulta que una cabecera del sector se plegaba a la definición popular del profesional publicitario como “publicista”, lo que los defensores de la denominación fetén no aceptamos.

La prensa general o “seria”, que se decía antes, siempre nos ha llamado publicistas y todo el mundo, el gran público, no ha dudado en emplear el término popular, que tan poco nos gusta a los que vamos de publicitarios puros, los “muy cafeteros”, que tanto se dice ahora.

La desavenencia por la titulación de la revista no duró, fue el propio Daniel Campo, el que me planteó la cuestión en sus justos términos y puso los puntos sobre las íes de “publicistas” y “publicitarios”. Daniel dijo: “Todo está bien, publicista es el que trata y estudia la publicidad y publicitario, el que la ejerce.

Yo soy publicista y tú eres publicitario”

Todos contentos:

La revista hace su papel: tratar e informar y la publi, el suyo: crear, planificar y desarrollar la acción publicitaria.

Daniel ha sido tan amable y tan profesional que, ni corto ni perezoso, ha estado siempre dispuesto a presentar o copresentar mis libros, en la Casa del Libro de la Gran Vía y otra, cuando jugamos en casa, en El Espacio de Graves y Agudos…

Siempre con un análisis del propio libro, lo que implica leerlo y subrayarlo, y con palabras tan elogiosas para el autor, que aprovecho para agradecerle. Espero que si hubiera un próximo libro, viniera de su retiro a acompañarme con sus generosas y acertadas consideraciones.

Y a la viceversa, que la jubilación es un período propicio para decidirse a contar tu vida profesional y Daniel podría sorprendernos esta vez con una buena noticia.

En todo caso, quiero referirme al título de este artículo, escrito sobre la marcha, nunca mejor dicho, que evidentemente es un eslogan (cada uno hace lo que sabe, claro), justificado por la trayectoria profesional de Daniel.

Estamos seguros de que a partir de ahora, “El Publicista” seguirá su camino con un equipo compacto y bien formado. Afortunadamente, había otro Dani (Moreno), que sabrá dar continuidad al invento.

Gracias por todo, querido Daniel Campo, que disfrutes mucho y te aburras poco.

En la confianza de que, desde dentro o desde fuera, seguirás siendo ….                                       

el mejor en tu Campo (con mayúscula).


Ricardo Pérez (Madrid, 1943) no es solo un creativo publicitario, es un estilo de creatividad en sí mismo. Un estilo basado en el uso ingenioso y humorístico de la palabra, si bien asociado fuertemente a la marca. Varias generaciones de españoles recordarán siempre sus Claro, calvo; El Reig de las camas; El que sabe, Saba y tantos otros eslóganes que han pasado de la publicidad al acervo popular.
Comienza en el área de medios (Estilo, Sagi, Ciesa-NCK) hasta que consigue dar el salto a la creatividad e inicia una trayectoria fulgurante: Danis, NCK, 1972 Tandem, MMLB Ricardo Pérez y después ya Ricardo Pérez y Asociados, en la que sigue al frente. Es autor de La huella de la publicidad (2005) y La publicidad tiene la palabra: el arte de vender por todos los medios (2019). En 2012 recibió el cdc de honor del Club de Creativos.
Descripción procedente de  la Academia de la Publicidad