La agencia ‘trollea’ su propio nombre en clave de humor con una campaña creativa que se hace eco de la peculiar forma en la que muchos se refieren a la misma de manera errónea
Weber Shandwick, consultora de comunicación y marketing con más de sesenta años de historia, ha lanzado una campaña que reconoce lo difícil que es pronunciar su nombre en español.
Natalia Sánchez y Raquel Capellas, co-directoras generales, explican: “Durante los veinte años que llevamos en la agencia es imposible calcular cuántas veces hemos deletreado el nombre de Weber Shandwick y cuántas veces lo hemos visto mal escrito o hemos escuchado una versión alternativa. Por eso, queríamos rendir tributo a nuestro estilo local y autóctono de pronunciación y reírnos de una situación que todos los que forman o han formado parte de Weber Shandwick han vivido y experimentado en algún momento”.
La activación consta de un video publicado en redes sociales en el que, irónicamente, un miembro estadounidense del equipo intenta explicar a sus compañeros como pronunciar “Shandwick” correctamente, sílaba a sílaba, pero que, finalmente y tras varios intentos, siempre acaba en “sándwich”. Una situación común al intentar pronunciar el nombre de la consultora y que ahora han querido transformar en una campaña en tono de humor.
Además, la consultora ha querido hacer partícipes de esta iniciativa a varias empresas con el envío de un kit creativo de Weber Sandwiches para que puedan disfrutar y saborear la campaña. Porque como indica su claim: “Lo importante no es cómo nos llamen, sino que nos llamen”.
Aparte del guiño al nombre, el sándwich es un ejemplo perfecto de las diferentes capas de expertise de la consultora donde se combinan: conexiones auténticas, estrategias basadas en datos, propósito corporativo, e ideas memorables.