AADA conciencia sobre el impacto físico y emocional de vivir con dermatitis atópica

La campaña busca sensibilizar sobre el impacto para elevar la importancia de no infravalorar los síntomas de los pacientes, pues se calcula que en España hay un millón de adultos afectados por esta patología, de los que cerca de 30.000 sufren dermatitis atópica moderada grave

En el marco del Día Mundial de la Dermatitis Atópica (DA), la Asociación de Afectados por la Dermatitis Atópica (AADA) ha lanzado los resultados de una campaña de sensibilización en la que cinco personas, con estilos de vida muy diferentes, han experimentado lo que implica vivir un día con dermatitis atópica. En esta campaña, la AADA ha contado con la participación de un dermatólogo, una médica de atención primaria, dos periodistas y una paciente, esta última encargada de verificar que el proceso reflejaba fielmente la experiencia real de vivir con DA. Los cinco participantes, con perfiles diversos, han podido comprobar el profundo impacto que la DA puede tener en su vida laboral, su salud física y en la esfera emocional.

Para conseguirlo, la iniciativa, desarrollada de la mano de la empresa británica A life in a Day, propone una experiencia inmersiva que simula los principales síntomas y afectaciones de la enfermedad. A través de un kit que se ha enviado a los participantes y una aplicación que han podido descargar en su teléfono móvil, han recibido las instrucciones en las que se les indicaba cómo debían proceder a lo largo del día y de la noche. Todas las actividades se han diseñado específicamente para recrear la realidad de los pacientes con DA, destacando el profundo impacto que esta enfermedad crónica tiene en sus actividades cotidianas.

“Esta campaña nace de la premisa de que, hasta que algo no se vive en primera persona, no se llega a comprender del todo. La DA es una enfermedad que va mucho más de la piel y que, aunque tiene una cara visible, que se manifiesta en síntomas como el picor constante y los eccemas, también afecta a una esfera más personal del paciente, que muchas veces pasa inadvertida, incluso para los profesionales que los tratan", destaca África Luca de Tena, responsable de comunicación de la AADA.

Entre las actividades que han formado parte de esta experiencia interactiva se han incluido desafíos periódicos que se han enviado al teléfono móvil de los participantes durante las 24 horas que dura el experimento, avisándoles de que un determinado síntoma aparecía, ya fuese durante la jornada laboral, el tiempo o libre o el periodo de sueño.

“Los síntomas van apareciendo, impidiéndonos dormir o desarrollar adecuadamente nuestro trabajo durante un cierto periodo de tiempo. Por ejemplo, durante mi jornada laboral tuve que atender a mis clientes con un eccema en el rostro, lo que provocó miradas curiosas y me genero cierta incomodidad", señala Pilar de Pedro, farmacéutica y participante en el experimento.

Évelyn Mayordomo, terapeuta ocupacional y paciente de dermatitis atópica, coincide con esta apreciación. A pesar de conocer previamente todos los síntomas por haberlos experimentado en carne propia, participó en la campaña para analizar si ésta lograba simular fielmente lo que implica vivir con la patología. "En general, considero que esta experiencia ha sido muy educativa para dar a conocer al mundo cómo nos sentimos. Al igual que mis compañeros, tuve que simular un eccema facial, y aunque la experiencia refleja lo que esta manifestación implica en nuestro día a día, debo señalar que, en mi caso real, en ocasiones, ha sido aún más grave. Eso sí, el picor que sentimos no ha sido posible reflejarlo ya que es algo muy intenso y limitante, que está presente en todo nuestro cuerpo, en cualquier actividad y en cualquier momento del día”, explica.

Los testimonios de esta experiencia han sido recopilados en un vídeo que la AADA difundirá con motivo del Día Mundial de la DA en sus redes sociales. En él, se explica el desarrollo de la experiencia inmersiva y lo que ha supuesto para los participantes, al tiempo que se anima a la sociedad a tomar conciencia del impacto de esta enfermedad, que afecta a un millón de personas en España, de las cuales 30.000 la sufren en su forma moderada-grave. 

Una enfermedad que va más allá de la piel

La DA es una enfermedad inflamatoria crónica que altera el sistema inmunológico y que se caracteriza por piel seca, enrojecimiento y picor intenso. El 54% de los pacientes asegura que el picor persistente y difícil de controlar es el síntoma que más padecen y es el responsable de la mayor parte de la carga de la enfermedad soportada por sí mismos y sus familias. Este picor los lleva a rascarse frecuentemente, produciendo sangrado y otros síntomas de la piel como el agrietamiento, descamación, supuración y piel seca o xerosis. Además, los pacientes muchas veces padecen otras enfermedades asociadas como el asma o la rinitis alérgica.

Los efectos de esta patología en la vida de los afectados son más graves e incapacitantes de lo que parecen y pueden provocar la estigmatización social del paciente que encuentra importantes obstáculos para desarrollar su trabajo, relacionarse con su entorno o formar una familia.