por Marta Nova
Si algo nos ha enseñado la evolución del marketing en los últimos años es que el cambio no solo es constante, sino cada vez más vertiginoso. Mirando hacia 2025, el panorama exige a las marcas no solo adaptarse, sino ser parte activa de la transformación. Desde mi perspectiva como directora de comunicación y social media, hay varias tendencias clave que moldearán el futuro del sector.
IA generativa: un aliado que nos reta a ser responsables. La inteligencia artificial ya no es el futuro: es el presente. Pero con el entusiasmo por su potencial llega un compromiso ineludible con la ética. ¿Sabías que el 43 % de los consumidores aún desconfía de los anuncios creados con IA? Este dato pone en evidencia la necesidad de ser transparentes y trabajar con datos de calidad. Para las agencias, esto no es solo un desafío técnico, sino una responsabilidad clave: nuestras estrategias, herramientas y mensajes deben inspirar confianza y reforzar la seguridad. La IA es poderosa, pero la confianza es insustituible.
Sostenibilidad: más que una tendencia, una oportunidad estratégica. Los consumidores ya no solo prefieren marcas comprometidas con el medio ambiente, lo exigen. Y con razón: en un mundo cada vez más consciente de los desafíos climáticos, la sostenibilidad dejará de ser opcional en 2025 para convertirse en una norma esencial. Esto no solo afecta a los productos, sino también a las estrategias de marketing, que deberán comunicar este valor de forma auténtica, relevante y libre de clichés vacíos.
El verdadero desafío está en transformar el compromiso con la sostenibilidad en un motor de innovación y crecimiento. Las grandes marcas ya están liderando este cambio, demostrando que, al integrar prácticas responsables, no solo generan impacto positivo en el planeta, sino también en su reputación, fidelidad de los consumidores y resultados económicos.
Para las marcas que aún no han dado este paso, la sostenibilidad representa una oportunidad única: diferenciarse, ganar relevancia y conectar profundamente con un consumidor que busca más que productos, busca propósitos. El futuro del marketing pasa por construir un mundo mejor, y las marcas tienen un papel protagonista en esta historia.
La personalización y la relevancia: experiencias que conquistan. Las marcas no solo deben comunicar, sino conectar profundamente. En 2025, la personalización y la relevancia marcarán la diferencia en un panorama saturado de mensajes. Entregar experiencias diseñadas a medida, que respondan a las necesidades y deseos específicos de los consumidores, será clave para fomentar la lealtad. Ya no se trata de hablarle a todos, sino de hablarle directamente a cada uno. Con el apoyo de tecnologías avanzadas de análisis de datos e inteligencia artificial (IA), las marcas están revolucionando la forma en que se relacionan con sus clientes. Este enfoque, bautizado como B2Me, pone al usuario en el centro, ofreciendo experiencias personalizadas que se ajustan a sus deseos y necesidades específicas. ¿El resultado? Interacciones únicas que fortalecen el vínculo emocional con la marca y fomentan una mayor lealtad por parte de los consumidores.
El auge del social shopping. El comercio social está revolucionando las reglas del juego, y plataformas como TikTok Shop y YouTube Shopping están liderando esta transformación. Estas herramientas no solo reducen barreras para las marcas más pequeñas, sino que también se convierten en un espacio crucial para que las grandes protejan su cuota de mercado. El éxito de estas plataformas muestra cómo combinar entretenimiento, interacción y conveniencia puede resultar en cifras de venta impresionantes y una conexión más cercana con los consumidores. Además, las redes sociales están ganando terreno como motores de búsqueda clave, especialmente entre las generaciones más jóvenes. Plataformas como TikTok, YouTube e Instagram se han convertido en herramientas fundamentales durante la fase de decisión de compra. Por ello, ya no basta con optimizar el SEO en Google: es imprescindible aplicar estrategias de posicionamiento también en los canales de social media.
Diversidad e inclusión sin perder rentabilidad. La evidencia sigue creciendo: la inclusión es un motor clave para el crecimiento de las marcas. Casi 8 de cada 10 personas a nivel global afirman que las iniciativas de diversidad e inclusión de una marca influyen en sus decisiones de compra, según datos recopilados por Kantar. Este impacto es aún más significativo entre los Millennials, la Generación Z, la comunidad LGBTQ+, así como las personas con necesidades especiales o discapacidades, además de en mercados emergentes. Por lo tanto, este año, las marcas deben reconocer que la diversidad y la inclusión no solo son principios éticos, sino factores estratégicos esenciales que juegan un papel fundamental en las decisiones de compra de los consumidores.
Diversidad e inclusión: el poder de conectar con los consumidores. La evidencia es clara: la inclusión impulsa el crecimiento de las marcas y fortalece su conexión con los consumidores. Según datos de Kantar, casi 8 de cada 10 personas en todo el mundo consideran las iniciativas de diversidad e inclusión como un factor clave en sus decisiones de compra.
“El humor seguirá siendo un recurso poderoso, especialmente para captar la atención de la generación X y los Baby Boomers, quienes lo perciben como un impulsor clave de la receptividad publicitaria”
En 2025, las marcas deben entender que el uso de un lenguaje inclusivo y la creación de contenidos respetuosos con las distintas culturas no son solo principios éticos, sino pilares estratégicos que influyen directamente en la percepción, la fidelidad y las decisiones de los consumidores. De este modo, las marcas construyen relaciones más auténticas y duraderas con una audiencia cada vez más exigente.
El poder del UGC. El crecimiento exponencial de la economía de estos creadores de contenido redefine cómo las marcas interactúan con sus audiencias. De hecho, han demostrado ser los mejores constructores de confianza, y al alinearse estratégicamente con ellos, las marcas no solo amplían su alcance, sino que lo hacen de manera auténtica y significativa. Sin embargo, no se trata de colaborar con cualquiera, sino de encontrar voces alineadas con los valores y objetivos de la marca. La partida presupuestaria para el UGC aumentará este año, aprovechando el poder de los creadores e influencers para impulsar el social shopping.
Influencers virtuales y contenido generado con IA. Pero no todos los influencers son de carne y hueso, ya que en el mundo de las redes sociales cada vez encontramos más creadores generados por inteligencia artificial. Con una apariencia humana pero un origen virtual, estos llamados AI influencers ya están colaborando con marcas en plataformas como TikTok e Instagram.
Además de su autenticidad percibida, estos perfiles presentan ventajas interesantes: son inmunes a las polémicas personales y se adaptan fácilmente a las necesidades y mensajes de las marcas. Avatares como @fit_aitana, uno de los primeros creados con IA por Rubén Cruz, ya están marcando un nuevo estándar en el mundo del marketing digital.
El futuro exige innovación creativa y sentido del humor. En 2025, ganarse la atención de la audiencia será más desafiante que nunca, especialmente en un entorno de redes sociales cada vez más competitivo. La clave no estará solo en “adaptarse a las plataformas que utilizamos”, sino en destacar y conectar con la audiencia de manera auténtica y significativa. Las marcas deberán apostar por la innovación creativa para sobresalir, experimentando con nuevos formatos, narrativas impactantes y contenidos que generen conversaciones.
El humor seguirá siendo un recurso poderoso, especialmente para captar la atención de la generación X y los Baby Boomers, quienes lo perciben como un impulsor clave de la receptividad publicitaria. Por su parte, la generación Y también responde positivamente al humor, pero combina su interés con una apreciación especial por contenidos que incluyan buena música, capaz de evocar emociones y construir conexiones memorables. Para la generación Z, sin embargo, la música será el auténtico protagonista. Los contenidos acompañados de bandas sonoras relevantes y en sintonía con sus gustos podrán captar su interés de manera inmediata, convirtiéndose en un elemento diferenciador clave.
En este panorama, el reto no será solo captar la atención, sino mantenerla de forma constante. Las marcas que logren entretener, sorprender y reflejar los valores de su audiencia serán las que destaquen en un escenario digital más saturado que nunca.
La fórmula mágica para destacar en 2025 no existe, pero sí hay un denominador común: la capacidad de ser relevante y adaptable. Desde Irismedia, seguimos trabajando para que las marcas no solo sobrevivan, sino que lideren en un mundo cada vez más competitivo y complejo. La clave estará en comprender a fondo las tendencias, escuchar activamente a los consumidores y encontrar el equilibrio entre innovación y propósito. En marketing, como en la vida, quien no arriesga, no gana.
