El estudio ‘La familia Alpha: análisis del consumo de medios’, ha arrojado luz sobre los hábitos mediáticos de las familias Alpha -con niños nacidos a partir de 2010 y padres generalmente millenials- y como estos determinan las compras navideñas. Actualmente la tecnología y la digitalización están redefiniendo las dinámicas familiares y transformando la comunicación de todos los sectores relacionados con la infancia, desde el de juguetes hasta la moda, pasando por el calzado o la alimentación, entre otros.
Los Alpha son mucho más sedentarios e individualistas que sus padres. Las actividades de juego más citadas por los padres y madres actuales cuando recuerdan su infancia son: la goma, la cuerda, las muñecas, el pilla-pilla, el escondite y la bicicleta. Mientras que las actividades de juego más citadas por los niños en la actualidad son: ir al parque, jugar con el móvil o la tablet, dibujar, manualidades, y juegos de construcción o mesa…
Esta generación está creciendo en un entorno digital sin precedentes y son considerados ‘nativos tecnológicos’, capaces de manejar dispositivos digitales desde edades muy tempranas. Esto tiene repercusión en sus formas de aprender, jugar y socializar. Los padres de esta generación tratan de combinar actividades digitales y tradicionales como educadores. Estos padres, nacidos entre 1980 y 1994, han crecido en un entorno de rápida evolución tecnológica que ha moldeado su forma de comunicarse y relacionarse. En comparación con sus porpios progenitores, los millennials son más participativos y comprometidos en la crianza de sus hijos.
El informe concluye que el tiempo libre de los más pequeños se ha visto considerablemente reducido en los últimos años debido al aumento de las actividades extraescolares y al uso intensivo de los dispositivos electrónicos. Esto ha transformado el sector juguetero enormemente, ya que también se ha concluido que los padres y madres de la generación Alpha, aunque son muy críticos con lo que consumen, toman decisiones cada vez más influenciadas por los propios niños, que actúan como ‘consultores digitales’ del hogar.
Se pone el foco en la importancia de adaptar las estrategias de comunicación, publicidad y producto a las características de esta generación y sus familias. Los juguetes que integran tecnología, las colecciones de moda sostenibles, los alimentos promocionados en plataformas digitales o hasta el calzado diseñado con inspiración en contenidos virales, están en el centro de esta revolución.
Estas generaciones ya no buscan productos, también experiencias que emocionen y compañías que compartan sus valores. Entender cómo es su consumo de medios es clave para diseñar campañas que no solo informen, sino que emocionen y creen un vínculo genuino con este tipo de consumidores.
